Mendrisse
Mendrisse
Artiste

Clara Pozniakoff

Hay Algo Misterioso E Indescriptible, Desconcertante En Ello. Ambos En Las Pinturas De Mendrisse.
Una Especie De Reflexión Profunda Dentro De Nosotros Mismos, En Regiones De Nuestro Subconsciente Que Somos Los únicos Que Conocemos. Poder Explorar.

Una Búsqueda Mística Que Personajes Atemporales, Que Bien Podrían Provenir De Nuestra Edad Media, Persiguen Sin Cesar. En Silencio.

Lo Sorprendente Es Que Las Pinturas De Este Artista Guardan Un Extraño Silencio. Cada Uno De Ellos Presenta Dos O Tres Personajes Con Rostros Enigmáticos, Con Los Labios Cerrados En Su Ensoñación.

Sus Enormes Ojos Comen El Lienzo, Pero Nunca Nos Miran. Se Instalan En Otro Lugar, Lejos De Nosotros, Lejos De Casa. Menos Que Esta Mirada Que De Ninguna Manera Está Destinada A Nosotros; No Está Completamente Girado. Hacia El Interior.

En Cierto Modo, Estos Rostros De Ojos Inmensos Y Fijos Nos Recuerdan A Las Estatuas Gigantes Que Encontramos En Ciertas Civilizaciones Antiguas, Símbolos Del Conocimiento Reservado Sólo A Los Iniciados.



Las Pinturas De Mendrisse Podrían Marcar Las Etapas De Una Búsqueda Iniciática, Donde Donde Se Unen La Mujer Y El Niño, El Maestro Y El Alumno, El Libro Y La Escritura, Paisajes Que Fácilmente Se Diría Bíblicos, Monte De Los Olivos O Jerusalén Vieja.

Estamos Inmersos En Una Atmósfera Irreal Y Serena, Que Evoca En Cierto Modo Las Novelas Iniciáticas De Henri Gougaud. Las Manos Largas Con Dedos Delgados Recuerdan Los Iconos De Siglos Pasados.

Algunas Pinturas, Por El Contrario, Presentan Decoraciones Fantásticas, Al Límite Del Surrealismo, Personajes Con Largas Túnicas Casi Monásticas Caminan Por Caminos Suspendidos En El Vacío, En Medio De Una Ciudad Que No Parece Una Ciudad. Nada Conocido: Símbolo De Este Viaje Interior Por Caminos Desconocidos, Más Allá La Búsqueda De Algo Que Nos Supera Y Permanece En Nosotros. Nunca Secreto.



Este Constante Cuestionamiento, Y Las Probables Respuestas Que Surgen En Cada Uno De Nosotros, Encuentran Su Expresión En Las Zonas Oscuras Y En La Luz Particular Que Ilumina Los Rostros.

Mendrisse, Para Quien Cada Obra No Puede Nacer Libre, Espontánea, Sin Ser Fruto De Una Larga Y Paciente Maduración, Supo Encontrar Un Estilo Y Una Paleta Específicos Para Su Obra. Comunicar Su Amor Al Prójimo, Su Deseo De Escuchar Y Comprender, De Alcanzar El Misterio De La Vida Y De Comprender Conocimiento, En Silencio Y Meditación.

Pertenece A Cada Uno De Nosotros Descubra El Mensaje Contenido En Todas Sus Obras, Y Cada Uno De Nosotros Quizás Vea Cosas Totalmente Diferentes.



Clara Pozniakoff

Octubre De 2003