Dufy: Dificil
¿Podemos Juzgar La Obra De Un Artista Por Sí Sola? ¿Tonterías Como Brillante?
La De Raoul Dufy, Por Ejemplo. Es Evidente Que Hay Margen De Mejora. Beber Y Beber Comer, Nuestros Ojos, En Las Obras De Dufy Que Connaissances Des Arts Muestra En El Artículo Que Dedica Este Mes A Los Pintores Más Parisinos De Le Havre. Qué Pensar De Estos cuadros, Biombos O Sillones « Decorado » De Las Torres Eiffel, El Panéon Y Las Flores? Y Totalmente Desierto. Pero Alegre Aun Así Gracias A Una Paleta Con A La Vez Tierno Y Vivaz.
Experimentamos Un Poco La Sensación De Que El Artista Se Ha Apegado A Su Obra. Fragmentos De Su Colorido Universo; Severo; Dónde El Podria. Si Hiciéramos Lo Mismo Hoy, Instantáneamente Estaríamos Cerca De Una Sobredosis. Es Peor Que Demasiado. Demasiado. Pero, Esta Vez Cuando Dufy Era Amigo De Fiesta De Jean Cocteau, El Exceso En Todo Era Una Forma De Higiene Festiva. Teníamos Muchas Ganas De Ver Espectáculos En Los Que " No Pasaría Nada. Allí Bailamos Con Máscaras De Animales Hechas De Cartón, Pintamos Los Adornos Y Los Firmamos Dufy.
Esto Lo Explica. Pero No Lo Justifica De Ninguna Manera. El Público De Los Artistas No Son Sus Contemporáneos. Familiarizarse Con El Genio Requiere Dirigirse Tanto A Las Personas Como A Las Personas. El Futuro. Así Es Como El Arte Nos Ofrece Espejos Del Futuro. Al Buscar Registrar La Eternidad En El Momento De La Obra. Y En Este Nivel, Francamente, ¿quién Querría Tener Un Sillón Dufy En Su Salón Entre Muebles De Diseño De Putmann, Ito O Bouroullec?
No Es Gracias A Sus Bonitas Decoraciones De Muebles, A Veces Elegantes O Incluso Clásicas, Pero A Menudo Con Un Kitsch Ingenuo Y Forzado; Que Raoul Dufy Tenía Posibilidades De Lograr Este Objetivo. A Tiempo Su Cita Con La Historia Del Arte. &Una Tumba; A Menos Que Los Críticos Del Futuro Coloquen A Castelbajac En El Mismo Rango Que Picasso.
Pero Podemos Juzgar El Trabajo De Un Artista En Función De Lo Que Es. Basura Y Brillante. Y Lo Extraño En El Caso De Dufy Es Que Finalmente Sobresale En La Prueba De La Reina: La Pintura. El Tema Y La Técnica Requieren Mayor Aclaración. Ser Cuidadosamente Elaborado Porque Los Candidatos Para El Puesto Notoriedad Hay Legiones Aquí. La Cuestión Es Diferente Que Cuando Uno Elige Como Marco Para Sus Cuadros Asientos Y Respaldos Flanqueados Por Pies Y Apoyabrazos. No Nos Sentamos En El Arte. Excepto Quizás Los Ladrones De Los Sanitarios De Oro Macizo De Cattelan.
Où Redescubrimos Que Dufy Era Ante Todo Un Pintor. Y Un Gran Pintor Incluso, Con Una Modernidad. Discreto Pero Profundo. Lo Más Sorprendente Es Que Dufy Utiliza En Sus Cuadros Entre Matisse Y Cocteau Los Mismos Ingredientes Que Industrializa En Los Patrones Textiles Producidos En Su « Pequeña Fábrica '. Una Fábrica Adelantada A Su Tiempo.
Encontramos Principalmente En El Lienzo La Paleta De Pasteles Soleados Realizada En Dufy, Lugares Desiertos Y Luego París, París, París. ¿La Diferencia Con Los Diseños De Muebles Fabricados En Pigalle? París No Se Exhibe. Aquí No Es La Capital Turística Del Mundo. La Ciudad De La Luz Queda Reducida A La Nada. Desde Las Fachadas Hausmannianas Hasta Apenas Esbozado Y, Sin Embargo, Reconocible Entre Miles. Incluso Visto Entre Dos Puertas, A Través De Una Ventana Pero En Ningún Caso Expuesto En Una Ventana.
El Lugar Desierto Representado Ya No Es La Ciudad Sino La Guarida Del Pintor Como En El Lienzo Titulado L'Atelier De L'impasse Guelma. El Universo Colorido Del Amigo De Cocteau Se Ha Convertido En El Vacío En El Que Se Crea La Obra. Las Pinturas Abismadas En Las Pinturas De Este Período Más íntimo Muestran La Modernidad De A Través Del Cual El Pintor Busca Un Camino Hacia La Eternidad. Más Que El Ruido Que Le Encantaba Hacer, Es Este Silencio De Dufy Lo Que Todavía Escuchamos Hoy.
Ilustración: Raoul Dufy - El Taller Del Impasse Guelma - 1877